Una investigación parlamentaria ha pintado un futuro sombrío para el icónico koala de Australia a menos que haya una intervención urgente para detener la destrucción de su hábitat.
Los estudios revelan que la población de koalas en Nueva Gales del Sur podría extinguirse en sólo 30 años.
El gobierno del estado se ha propuesto doblar el número actual de ejemplares y algunos científicos están haciendo esfuerzos para implicar a los dueños de granjas y bosques en la reforestación de sus hábitats.
La bióloga australiano-chilena, Paola Rivera ha estudiado a la población de koalas en la península Mornington, en Victoria, para examinar cómo están distribuidos en ese territorio y cómo les afecta la fragmentación de su hábitat.
Puntos destacados:
- Los koalas que viven en zonas fragmentadas por el desarrollo urbanístico necesitan desplazarse grandes distancias por el suelo, lo que les pone en serio peligro.
- Estudios biológicos revelan que la población de koalas en Nueva Gales del Sur podría extinguirse en sólo 30 años.
- Una bióloga chileno-australiana ha iniciado un proyecto de rehabilitación de su hábitat después de analizar su población, mediante las grabaciones de sus sorprendetes sonidos nocturnos.
En condiciones naturales, donde su hábitat no se ha fragmentado para urbanizar o construir carreteras, cada koala macho necesita dos hectáreas para vivir y reproducirse, pero en zonas fragmentadas, necesita abarcar un área de nueve hectáreas lo que les pone en serio peligro.
“Tiene que viajar y moverse por el suelo y se exponen a peligros de ataques de animales domésticos, o de ganado, o a heridas porque tienen que pasar por estructuras o porque resultan atropellados por los vehículos”.
Para estudiar el comportamiento de los koalas en la península Mornington, Rivera colocó 130 dispositivos de grabación de sonidos distribuidos por los árboles para grabar sus vocalizaciones nocturnas, mediante las que machos y hembras se comunican para aparearse.
“Cada koala produce un sonido diferente y eso se percibe en las grabaciones, puede ser más profundo, más alto, el nivel de la frecuencia cambia, cada uno tiene su propia señal”.
La bióloga recogió las grabaciones durante siete días y en algunas de ellas captó cómo el tráfico de los coches en la noche tapaba los sonidos de los koalas, lo que dificulta su comunicación, además recogió gritos de gente, fuegos artificiales y maquinarias diversas.
Source: Provided, David Permezel
A pesar de las tristes perspectivas para los koalas que viven cerca de zonas habitadas, Paola está esperanzada por el interés que encontró en la comunidad para ayudar a la conservación de la población de koalas.
En el área de Mornington, el 74% del terreno está en manos privadas y el resto pertenece a la municipalidad, por lo que ella confía en que podrán mejorar las condiciones del bosque con la ayuda de todos.
“La idea es crear un tipo de corredor o bio-link (…) es un proyecto pequeño en este momento, pero esperemos que se siga agrandando con el apoyo de la comunidad y con donaciones.”
Tree planting day. Mornington Peninsula Koala Conservation group Source: Arthurs Seat
“Lo que vamos a hacer es acercarnos a los sueños de propiedades para plantar arboles nativos que prefieren los koalas en esa área. El sector ya tiene koalas, los he escuchado en las grabaciones y queremos ayudar a la gente para revegetar el área y crear enlaces de vegetación”.
Cerca de 25 propietarios ya se han registrado para el proyecto de revegetación que planea plantar unos 25,000 árboles para 2021.
Escucha el podcast presionando la imagen principal superior
Información relacionada
Los koalas, los emblemáticos animales de Australia, beben agua lamiendo los árboles
