Crece presión para que el PM investigue una acusación de violación sexual presuntamente perpetrada por ministro australiano

Parliament House in Canberra

Source: AAP

Continúa creciendo la presión sobre el primer ministro, Scott Morrison para que investigue una acusación de una violación perpetrada supuestamente en 1988, presuntamente por un diputado del gobierno liberal que no ha sido identificado. En paralelo a este caso, la senadora de Victoria Sarah Henderson remitió a la Policía Federal Australiana el domingo otra acusación de violación, contra un diputado federal laborista no identificado, tras recibir un correo electrónico de la presunta víctima.


Dos nuevas denuncias de presuntas violaciones sexuales empañan al Gabinete australiano y al opositor Partido Laborista, a dos semanas después de que Brittany Higgins, una exempleada del Partido Liberal, denunciara que fue víctima de un asalto sexual por un entonces compañero de trabajo en el Parlamento en 2019.

La primera de estas nuevas acusaciones se supo públicamente el viernes, después de que la senadora de los Verdes, Sarah Hanson-Young, y la senadora laborista, Penny Wong, recibieran una copia de una carta anónima relacionada con la acusación, que también fue enviada al primer ministro.

Según ha descrito Hanson-Young, la carta de 33 páginas, es un dossier completo con relatos detallados y evidencias recopiladas. El asunto ha sido remitido a la Policía Federal de Australia (AFP), la cual ha informado que se pondrá en contacto con las autoridades estatales pertinentes.
A pesar de que la carta no se dio a conocer públicamente sino hasta la semana pasada, varios políticos dicen que si tenían conocimiento de la acusación mucho antes. 

La senadora Penny Wong confirmó que se enteró por primera vez de la acusación en noviembre de 2019 cuando se encontró con la presunta víctima en Adelaida.

Además, el ex primer ministro, Malcolm Turnbull afirmó que la mujer le escribió en 2019 con detalles de las acusaciones, las cuales él remitió a la policía de Australia del Sur.
La mujer afirmó haber sido violada en 1988 en Sídney cuando ella tenía 16 años, por un hombre que ahora es ministro del gabinete federal.

Por su parte, la policía de Nueva Gales del Sur también confirmó que había recibido el informe con la denuncia de violencia sexual histórica en febrero de 2020, pero que la investigación se había suspendió tras la muerte de la mujer de 49 años en el centro de las acusaciones. Ella se quitó la vida a mediados del año pasado, por lo que también hay una investigación forense en curso Australia del Sur.

Estas acusaciones vienen en un mal momento para el gobierno de Morrison, el cual tiene ya una quincena en la silla caliente, con todos los ojos y preguntas puestas sobre su respuesta ante el escándalo de la presunta violación en el Parlamento de la exasesora liberal, Brittany Higgins.

Ahora, la senadora de los Verdes Sarah Hanson-Young está presionando al primer ministro para que también responda a la acusación histórica de violación contra uno de sus ministros.
Es justo que el Primer Ministro se asegure de que esto no se esconda bajo la alfombra, y que actúe para garantizar la integridad de su gobierno.
“No podemos tener una situación en la que una acusación de violación tan horrible sea contra un miembro de alto rango de su gobierno y nadie haga nada”, reclamó Hanson-Young.
Para muchos, esta acusación ha golpeado la reputación del gabinete de Morrison, y ha creado una ola de especulación sobre quién es el ministro acusado.

El fin de semana, las redes sociales en Australia ardían al rojo vivo con alegatos, y hasta gráficos que mostraban la edad de cada ministro y si vivía o había visitado Sídney en 1988, en un afán por identificar al acusado.

En este sentido, el ministro de Finanzas, Simon Birmingham, y otros políticos, han enfatizado que es de suma importancia que se mantenga la presunción de inocencia del acusado, dado que se trata de una supuesta violación histórica y que la mujer que dijo haber sido víctima ha fallecido.

“Todo el mundo tiene derecho a la justicia natural, es importante respaldar a la policía para que haga su trabajo; respaldamos a la policía para que haga su trabajo ... esa es la manera correcta de manejar esto. No deseo que nadie pierda sus derechos a la justicia natural, quiero que la policía esté capacitada para hacer su trabajo”.

Sin embargo, la senadora Hanson-Young ha declarado a la ABC que cree que el ministro del gabinete no identificado debe apartarse del cargo, a la espera de una investigación independiente por parte de un eminente exjuez.
No puede ser resuelto por la policía porque la mujer ha muerto y las normas en torno a estos temas en Nueva Gales del Sur son así, que es la razón por la que se nos escribió la carta a los tres en primer lugar, pidiendo algún tipo de investigación discreta.
“Un exjuez retirado debe examinar el expediente de las pruebas, considerar la información disponible y luego dar algunas recomendaciones al primer ministro”, insistió Hanson-Young.
Por su parte, el líder del laborismo, Anthony Albanese dijo al programa Insiders de la ABC el domingo que Morrison tenía que considerar muy seriamente cómo actuar frente a esta situación, ya que la acusación ha colgado una nube gris sobre la confianza pública en las instituciones y en los miembros de su gabinete.
Esta es una verdadera prueba. El Primer Ministro debe confirmar consigo mismo si es apropiado que el ministro que es objeto de estas acusaciones permanezca en su puesto actual.
“La acusación debe ser investigada por las autoridades, pero esto ahora será una nube oscura sobre el parlamento y el gabinete. El Primer Ministro es quien tiene la responsabilidad de nombrar el gabinete. Él hace esos nombramientos él mismo. Así que él debe asegurarse de que la composición actual del gabinete pueda continuar, que sea sostenible, eso realmente es un asunto suyo,” señaló Albanese.

“(Morrison) está a cargo del gabinete. Este es un momento en que, después de una quincena muy difícil, los australianos buscarán que brille la decencia, y que haya una respuesta adecuada que no se trate de gestión política, sino de transparencia”, concluyó. 

En paralelo a todo este caso, la senadora de Victoria Sarah Henderson remitió el domingo a la Policía Federal Australiana una acusación de violación contra un diputado federal laborista no identificado, tras recibir un correo electrónico de la presunta víctima.
Victorian Senator Sarah Henderson has referred a rape allegation against an unnamed Labor MP to the Australian Federal Police.
Victorian Senator Sarah Henderson has referred a rape allegation against an unnamed Labor MP to the Australian Federal Police. Source: AAP

Investigación sobre la cultura laboral "tóxica" en el Parlamento

Todos estos casos han a su vez puesto mayor presión sobre quién liderará la investigación independiente sobre la cultura del parlamento como lugar de trabajo, ya que algunos expertos consideran que este nombramiento es fundamental para asegurar la legitimidad del proceso.

Esta investigación fue anunciada tras la acusación de Brittany Higgins. Se espera los términos de referencia y el nombramiento de quién dirigirá la investigación, sea anunciado esta semana.

En ese sentido, la directora ejecutiva de Gender Equity Victoria, Tanja Kovac, dice que esa persona debería ser la Comisionada de Discriminación Sexual de Australia, Kate Jenkins.

“Queremos que alguien que esté plenamente informado sobre la legislación lleve a cabo la investigación. Y esa es nuestra Comisionada de Discriminación Sexual, quien debería liderar la investigación sobre cuán prevalente es la violencia de género en nuestro parlamento.”

La investigación abarcará tanto los diputados de todo el espectro político, como todo el personal de apoyo que trabaja en el Parlamento.

Escucha el informe completo presionando sobre la imagen principal.

Cómo acceder a líneas de ayuda o apoyo:

  • Línea de ayuda para víctimas de una agresión sexual o violencia doméstica: 1800RESPECT, o www.1800RESPECT.org.au.
  • Lifeline 131114

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